En ambos casos, las cartas de tarot operan como espejo de lo interno: no dictan una verdad, sino que reflejan aspectos que a menudo están ocultos a la conciencia cotidiana. Estamos tan envueltos en nuestro propio Moi, y no hay nada de malo en eso, por la forma en que https://hamide383knp2.eedblog.com/profile